
- Mantenle siempre puesta su correa así sea sin la tiranta, es importante por si necesitas agarrarlo rápidamente de ser necesario.
- Lleva bolsas para recoger sus necesidades: mantener todo limpio para que todos disfruten de la playa.
- Llévale agua limpia, y asegúrate que la beba constantemente ya que el sol puede llegar a deshidratarlo rápidamente, además vigila que no beba agua de mar, ni que trague arena ya que puede traerle problemas gastrointestinales.
- Escoge un sitio tranquilo y preocúpate de protegerlo del sol excesivo, identifica un lugar con sombra por si lo necesita y recuerda que puedes utilizar un protector solar especial.
- Evita de todas maneras el sol en las horas centrales del día, la arena se vuelve muy caliente y nuestro perruno puede sufrir dolorosas quemaduras en las patas (las almohadillas).
- No lo pierdas de vista en ningún momento, sobre todo si se va a bañar, jugar en la playa, correr o perseguir una pelota. Si lo llevaste es para que todos se diviertan, pero hay que tener ciertas precauciones.
- Hay que elegir una zona con poca profundidad y donde no haya corrientes. Aún así, hay que prestar mucha atención sobre todo si en la playa hay medusas o erizos.
- Por último, y ya de regreso en casa dale un baño con agua dulce, esto servirá para eliminar los restos de sal y de arena y le ayudará a proteger la piel y el pelo.
